La etapa de este domingo de la Vuelta a España, la decimoquinta, es un paseo de media montaña por Navarra para dejar atrás los Pirineos, las imágenes que han dejado para la historia, y alcanzar el segundo y último día de descanso de la carrera.
Serán 156,5 km con salida en Pamplona, llegada a Lekunberri y tres subidas puntuables.
La primera de Tercera, al Puerto de Lizarraga, muy largo pero también muy tendido (19,3 km al 2,6 por ciento); y las dos últimas sendas ascensiones al Puerto de Zuarrarrate, de Segunda y un poco más exigente (7,3 km al 4,8).