Lourdes Climent Moreno vivió este sábado su día más feliz al comenzar su reinado en las fiestas de Castelló. El Teatro Principal explotó en una sentida ovación al recibirla y también al despedirla en la Imposición de Bandas. Fue una ceremonia que erizó la piel de todos los presentes y que transcurrió con agilidad mientras sonaban las músicas tradicionales que completan el sentido de las fiestas de la capital de la Plana.
La majestuosa banda verde pasó de las manos de la alcaldesa, Begoña Carrasco, al precioso vestido beis con toques dorados de la nueva reina de las fiestas. Carrasco se acercó con solemnidad a Lourdes, le dijo unas palabras —en sus labios se leyó «qué guapa»— y le impuso la enseña con la que la joven de 24 años representará a la ciudad durante el próximo año.
Emoción y sorpresas
Radiante durante el evento y sin poder parar de sonreír, Lourdes dijo a Mediterráneo al término de la velada que sintió «mucha emoción en todo momento por todas las sorpresas que ha habido durante la noche». «Siento mucho orgullo de poder representar a mi ciudad y ahora voy a disfrutar de cada momento y de cada vivencia», afirmó Lourdes, castellonera desde niña.
Las obras más icónicas volvieron a sonar a cargo de la Banda Municipal de Castellón, que abrió y cerró con el ‘Rotllo i Canya’ y acompañó con el ‘Lanceros de la Reina’ el momento en que Lourdes subió ceremoniosamente las escaleras.
La imposición de la banda tuvo como melodía, como no podía ser de otra manera, la ‘Marxa de la Ciutat’, en un momento de magia y pasión. La emoción siguió cuando ya sentada en el sillón desde el que comenzó a reinar, el cojinero real Álvaro Voltes, apareció para colocar el cojín a los pies de Lourdes.
Lourdes vivió así el día soñado por tantas niñas castellonenses y que ella ha anelado hasta que se ha convertido en realidad. Desde el palco, la anterior reina, Carmen Molina Ramos, la aplaudió —y también fue aplaudida—, con fuerza. En los palcos también estuvieron las representantes de las Fallas de València, la fallera mayor Laura Mengó; y la bellesa del foc de Alicante, Belén Mora.
Emoción total
La emoción también la vivieron los 19 sectores de la ‘festa’, cuyas madrinas y presidentes lucieron sus mejores galas mientras la reina de las fiestas de 2019, Natalia Palacio Bernad, presentó el acto con muchas tablas, en una tarde emotiva también para los presidentes de las gaiatas.
La concejala de Fiestas, Noelia Selma, impuso las bandas, una a una, a Ana Escudero Monge (Brancal de la Ciutat); Paula Torres Claramonte (Fadrell); Marta Olaria Blanch (Porta del Sol); Paula Adell Sales (l’Armelar); Rosa Martínez Muñoz (Hort dels Corders); Saray Traver Tena (Farola-Ravalet); Noelia Fabra Galí (Cor de la Ciutat); Carla Collazos Rovira (Portal de l’Om); Noelia Personat Guerrero (l’Espartera); Lledó Marzá Bellido (el Toll); Mireia Muñoz Barrionuevo (Forn del Plà); Carla Museros Marqués (el Grau); Marina Leva Dolz (Sensal); Cristina Álvarez Museros (Castàlia); María Voltes Usó (Sequiol); María Tirado Linares (Rafalafena); Laura Sala Navarro (Tir de Colom); Claudia Arrufat Muriach (Crèmor); y Raquel Naches Montesinos (la Cultural). Luego, la corte de honor al completo recogió su límpida banda blanca. Fueron Na Violant, María Rodríguez Santamaría; y las seis damas de la ciudad: Diana Vico Casanova; Adriana Llopis Pascual; Irene Arasa Miralles; Marta Gual Irigoyen; Laura Traver Sanchis; y Teresa del Carmen Cumba Soler.
Instante desafortunado
La madrina de Tir de Colom, Laura Sala, sufrió una desafortunada caída cuando le tocó despedirse y tuvo que ser trasladada al hospital después del acto por una torcedura en el pie. Pese a la caída, trató de mantener la compostura para saludar a la reina, y luego recibió un caluroso aplauso de parte de todo el Teatro, deseándole una rápida recuperación.
