Rosal de Las Escuelas – Arroyo Guarromán – Trassierra

Entre grandes dehesas


El destino es único, pero el camino vale la pena. Llegar a Santa María de Trassierra entre dehesas es posible atravesando la ruta que transcurre entre Rosal de las Escuelas y la barriada, pasando por el arroyo Guarromán. Durante tres horas y medias, a lo largo de 10 kilómetros, se alternan importantes espacios de alcornoques y encinas. Un tesoro para el ganado y para quienes deseen deleitarse con el entorno natural de Córdoba. Para iniciar la ruta hay que llegar, primero, al kilómetro 10,5 de la CO-3402, en dirección a la barriada periférica. El autobús a Trassierra (T), en este caso, es una opción. En ese punto, un camino de tierra a la derecha da comienzo a un recorrido con extensos tramos de dehesas.

Un grupo de ciclistas en la entrada de la finca Valdejetas.

En ese paseo, la Fuente de la Marquesa, abastecida en época romana por un acueducto que nacía en la Fuente del Elefante y en el arroyo Bejarano, es el primer enclave histórico. Especies como los madroños acompañan a un ligero ascenso hasta el arroyo Guarromán. Pasada la finca de La Jarosa, un largo tramo conduce al llano del Pozo de la Cruces, donde se cruzan caminos y veredas. Tomando el sendero que se dirige al norte, por la Vereda de La Canchuela, se acaba llegando a la barriada de Santa María de Trassierra.

Del destino poco hay que descubrir. Sus construcciones se alzan sobre una antigua villa, cuyo origen se remonta al siglo XVI. La parroquia, de arquitectura gótico-mudéjar, es, sin duda, la gran perla que se esconde entre la poca población de esta barriada ubicada en plena Sierra Morena.