El Ibex 35 sube moderadamente este viernes (+0,27%, 9.335 puntos) y despide una semana en la que ha cerrado en negativo todos los días. El lunes se dejó un 0,35%, el martes, un 0,26%, el miércoles, un 0,83% y ayer jueves, un 0,05%. En el acumulado semanal, y a la espera de lo que haga definitivamente hoy, el selectivo español pierde alrededor de un 1,2%.

Dentro del Ibex destacan ahora las alzas en Indra, Acciona Energía y Sabadell, mientras que apenas caen títulos. Telefónica, que fue ayer uno de los mejores valores (+2%), sube moderadamente. La operadora ha sido claramente protagonista de la semana por la entrada sorpresa en su accionariado del mayor operador saudí, STC Group, que se ha convertido en el principal accionista con el 9,9%. El Gobierno sigue reiterando que «velará» por los intereses de España y por la compañía, mientras que el presidente de la operadora, José María Álvarez-Pallete, se reunió ayer con STC en Arabia Saudí para conocer más detalles sobre sus intenciones.

ESPERANDO AL BCE

La semana ha estado caracterizada por la tranquilidad en la Bolsa española y en el resto de plazas mundiales. Así, puede considerarse una semana de transición a la espera de que el jueves que viene se pronuncie por fin el Banco Central Europeo (BCE). El mercado ve más probable que el BCE mantenga la próxima semana los tipos sin cambios que asistir a un nuevo alza de tipos. Eso sí, si hay una pausa, será ‘hawkish’, es decir, Christine Lagarde dejará muy claro que los tipos permanecerán altos durante más tiempo, e incluso el BCE podría optar por no subir en esta ocasión pero sí hacerlo en el próximo encuentro.

De momento, ‘las espadas están en todo lo alto’. Lagarde ha evitado dar pistas sobre lo que se piensa hacer en sus últimas comparecencias y realmente el mercado no descarta que al final haya una nueva subida. Los inversores siguen, eso sí, muy pendientes de los datos macro, más determinantes que nunca en las próximas decisiones de los bancos centrales.

Y, respecto a esos datos, cabe destacar que la agenda de la última jornada bursátil de la semana viene muy tranquila. Hoy se ha publicado el IPC final de agosto en Alemania (confirma una moderación al 6,1%) y en Japón se ha conocido el PIB del segundo trimestre, que se ha revisado a la baja desde el 6% del dato preliminar en tasa anualizada hasta el 4,8%, por debajo de lo esperado por el mercado.

En Asia cabe destacar también que la Bolsa de Hong Kong ha permanecido cerrada debido a las tormentas.

GUERRA TECNOLÓGICA

El Nasdaq fue ayer el peor índice de Wall Street en medio de las últimas informaciones que generan más agitación en el mercado tecnológico.

Las acciones de Apple cayeron este jueves un 3%, lo que dio continuidad a las pérdidas registradas por la compañía en la sesión del miércoles ante la información adelantada por ‘Bloomberg’ que asegura que China ha decidido ampliar la prohibición del uso de iPhones a agencias respaldadas por el Gobierno y empresas estatales. En total, las ventas de ambos días han hecho que la empresa pierda cerca de 200.000 millones de dólares de su capitalización bursátil.

¿AGOTANDO LAS VENTAS?

El Ibex registró ayer su sexta sesión consecutiva en rojo. No obstante, el cierre de la pasada jornada fue prácticamente plano, «lo que parece que puede ser el primer indicio para que podamos ver la vuelta de las compras«, afirman los analistas técnicos de Bolsamanía. «Es importante que no pierda el nivel de los 9.170 puntos, precios en donde se encuentra la media de 200 sesiones», recalcan.

Para ver una mejora técnica habría que esperar a un cierre por encima de los 9.614 puntos, máximos del pasado 30 de agosto. A medio y largo plazo plazo el sesgo sigue siendo claramente alcista.

OTROS MERCADOS

El euro se cambia a 1,707 dólares (+0,07%). El petróleo desciende. El Brent vuelve por debajo de los 90 dólares el barril (89,74 dólares) y el WTI se sitúa en 86,54 dólares.

El oro sube un 0,33% (1.948 dólares) y la plata, un 0,4% (23,33 dólares).

El bitcoin avanza por encima de los 26.000 dólares (26.268 dólares). El ethereum sigue por debajo de los 1.700 (1.647 dólares).

La rentabilidad del bono americano a 10 años se sitúa en el 4,232%.