Una rueda de prensa sin Baraja no habría tenido ninguna validez para la afición del Valencia CF. Pero, como de costumbre, no es en la afición en quien ha pensado Layhoon. La presidenta que no quiere serlo y a la que Lim tampoco escucha se ha limitado a cumplir con el entrenador. ¿Por qué? Pues porque el trato era que el club dijera que con una plantilla como la que se ha hecho solo se puede aspirar a no bajar. Y gracias.

Así que es cosa del Pipo dar por buenas tanto las palabras que coinciden con lo que él piensa como las demás con las que no, especialmente las falsedades sobre el mercado de fichajes. No hay más: el resto ya se sabe de sobra. Lim ha cerrado el grifo, además con saña y una pésima gestión, y de esta manera condenado a que el histórico Valencia CF sea equipo que antes o después dará con sus huesos en Segunda. Tampoco la pantomima del management local da para más, por lo que se reinicia un periodo en el que la única solución es que Lim se marche. Sin embargo, para que eso pase no solo tiene que vender y que alguien le compre sino también que los políticos y el resto de actores implicados se pongan las pilas con las herramientas que tienen y que por cierto son muchísimas.

Hay que hacer más. Y que la presión sea a todo campo… Es momento de unión, de que el valencianismo reme a una, de sumar en vez de dividir. Vale que de aquellos lodos, estos barros, pero diez años después el ‘reset’ tiene que ser de verdad y definitivo. Y para predicar con el ejemplo, empezamos nosotros. Pese a ser un medio volcado en la denuncia a la gestión de Lim, uno de los artífices del final de Anil con los audios y defensor de las causas del valencianismo y el deporte valenciano, el cuerpo nos pide un acto de contrición.

Con transparencia, estas son unas disculpas sinceras por nuestros esqueletos en el armario, por más que sean épocas diferentes y la deriva actual la consecuencia de etapas casi tan nefastas como esta. Un paso que ojalá cunda hacia un ‘mea culpa’ colectivo en el que los que acertaron desde el inicio, los que cambiaron de opinión y los que lo han hecho ahora vayamos de la mano para recuperar el Valencia CF.