La muerte de María Jiménez a los 73 años ha conmocionado a España. La artista marcó una época con su personalidad arrolladora, pero su historia personal también fue el reflejo de un tiempo muy particular en nuestro país. Por eso recordamos su figura y sus momentos más icónicos, desde su historia con Pepe Sancho hasta sus frases más sorprendentes, pasando, por supuesto, por su lado más reivindicativo.

Su relación con Pepe Sancho comenzó en 1978, cuando se conocieron en un restaurante de Madrid, siendo ambos ya muy conocidos. Se enamoraron rápidamente y dos años después se casaron, pero una de sus mayores discusiones llegó, precisamente, el día de su boda. Terminaron casándose y separándose en tres ocasiones, y fueron padres de un hijo, Alejandro, en 1983.

María Jiménez en el día de su primera boda, cigarro en mano
María Jiménez en el día de su primera boda, cigarro en mano

Después de su primera ruptura, María Jiménez perdió a su primera hija, Rocío, en un accidente de tráfico. El dolor les volvió a unir y el 27 de febrero de 1987 se casaron de nuevo en Costa Rica. En sus memorias, la cantante explicó que Pepe Sancho fue hundiendo su personalidad y su carácter, arrinconándola y anulándola. Se casaron de nuevo en Nepal, pero la artista no era feliz en su matrimonio.

María estaba desaparecida de la vida pública, por deseos de Pepe Sancho y por su afán de mantener a su familia unida. Pero la cantante vivió un nuevo renacer a principios de los 2000, volvió a la palestra y finalmente se divorció. Inicialmente se habló de «desgaste» en su matrimonio, pero más tarde se supo que había sido la infidelidad por parte del actor y sus continuos malos tratos. «Me daba una paliza y me decía: vamos a casarnos otra vez. Y yo como una tonta, después de dos carantoñas, le creía», recordaba ella.

«Yo no soy de madera»

María Jiménez fue fuerte, reivindicativa, pero también sincera y vulnerable. No le importaba mostrar su lado más cercano, como lo hizo en esta entrevista con Jesús Quintero. Se realizó poco después de la última separación de la cantante y Pepe Sancho, y en la conversación llama al actor «el verdugo».

«No quiero ser víctima pero casi siempre soy víctima, entonces me defiendo como gata panzarriba, como haría cualquier persona que tenga temperamento», explicaba María Jiménez. Añadía, además, que no era de madera, y que había sentido ganas de morirse en alguna ocasión.

«He sido siempre libre de espíritu»

A pesar del sufrimiento que atravesó durante los peores años de su matrimonio, María Jiménez siempre fue una persona positiva. Lo explica en esta entrevista, en donde asegura que, incluso con todos los lados malos, volvería a repetir su vida de principio a fin.

«He sido siempre libre de espíritu, porque me siento así, el público se da cuenta«, desveló. «Cuando ha habido algún problema han podido más las cosas buenas que las cosas malas», añadió.

«Y a ti qué te importa»

A pesar de haber marcado un antes y un después en la figura de la mujer, muchos considerarán que María Jiménez no era la artista más fácil de tratar. La prueba está en esta rueda de prensa de 2003, en donde presentaba su nuevo disco y entraba a enfrentarse a los periodistas allí presentes como si de una pelea se tratara. Sin embargo, las imágenes han perdurado mostrando a una artista con tremendo sentido del humor y ninguna vergüenza.

A la pregunta de si tenía novio respondió con un «¿a ti qué te importa?». Después puntualizó diciendo: «Corred la voz de que estoy soltera y soy un braguetazo«. Cuando quisieron saber si destacaría algún tema del disco, respondió: «Todos. Son los 15 mejores polvos que he echado en mi vida».

En la misma rueda de prensa criticó también a Aznar, a quien consideraba culpable de la piratería.

María Jiménez se manifiesta contra la piratería en 2003
María Jiménez se manifiesta contra la piratería en 2003

Arrasando con una apisonadora

Poco después, María Jiménez hizo un acto promocional en el que aparecía aplastando miles de CDs piratas con una apisonadora. Fue parte de su renacer como personalidad pública, solo un año después de su divorcio definitivo de Pepe Sancho, demostrando que siempre había sido de armas tomar.

Eran unos 10.000 discos falsificados y decomisados en los tres años anteriores por la Policía Municipal de Arganda del Rey, donde se organizó la cita. Primero pasó por encima con la enorme máquina y luego bailó sobre ellos.

«Vete a por coño»

A Amador Mohedano le dejó sin palabras en una de sus últimas apariciones telefónicas en Sálvame Deluxe. Después de que el hermano de Rocío Jurado acusara a la cantante de ser difícil y de sacar algunos de sus trapos sucios, María Jiménez se cansó. Mandó unos audios a los colaboradores en donde cargaba contra el que fuera su representante.

«No te creas nada de Amador Mohedano, que es un falso y un embustero como su hermana«, decía María Jiménez. Se había puesto en contacto con María Patiño y con Chelo García Cortés, harta de las declaraciones del exrepresentante. Terminó su intervención diciéndole al hermano de Rocío Jurado que se fuera «a por coño».

«Son lobos disfrazados de corderos»

Una de las últimas entrevistas de María Jiménez fue en hace dos años en Liarla Pardo, donde le decía a Cristina Pardo cuál era su mensaje para las mujeres que eran víctimas de maltrato: «Al primer grito, denunciad».

Además, confesaba que después de lo que ella había sufrido con Pepe Sancho ya no aguantaba «ni media ni un cuarto». Y le decía a todas aquellas personas que habían pasado por algo parecido que, si ella había podido recuperarse, todas podían salir.

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