La líder de Sumar, Yolanda Díaz, se ha mostrado esperanzada este miércoles de que en España habrá de nuevo Gobierno progresista tras el diálogo que mantuvo el pasado lunes en Bruselas con el expresidente de la Generalitat catalana Carles Puigdemont. «Después de la conversación con el señor Puigdemont estoy convencida de que va a haber un Gobierno progresista en España y que, además, tenemos que ver a Catalunya no como un problema sino como una auténtica oportunidad», ha trasladado en Italia.
Durante un diálogo junto a la secretaria del Partido Democrático, Elly Schlein, y del diputado en el Parlamento italiano Andrea Orlando, con motivo de su asistencia a la Fiesta de la Unidad que organizan formaciones progresistas, Díaz ha reivindicado que España es un país «diverso» con una «riqueza» de culturas, lenguas y formas de hacer política. En consecuencia, ha celebrado que en el Congreso tengan la posibilidad de poder intervenir en diferentes lenguas cooficiales a raíz de la proposición de ley para reformar el reglamento de la cámara que han registrado PSOE, Sumar, ERC, Bildu, PNV y BNG.
El ejemplo del acuerdo para la Mesa del Congreso es una muestra para Sumar de que es posible ese Gobierno de izquierdas, que algunos ya bautizan como plurinacional. La proyectada mayoría compuesta por las fuerzas catalanas y vascas, el PSOE y Sumar debería ser suficiente para la investidura de Pedro Sánchez. La cesión de parlamentarios para la creación de grupos parlamentarios por «cortesía» dibuja también esas futuras alianzas y personas de consenso para ese Ejecutivo «plurinacional» abierto a múltiples sensibilidades políticas y flexible en asuntos que han sido tabú en los últimos años.
Ejecutivo progresista
Díaz ha hablado con diversos líderes catalanes y cree que «absolutamente» va a haber un Ejecutivo progresista que permita progresar a nivel económico, en materia de trabajo, en feminismo y en la lucha contra el cambio climático. Por otro lado, ha reivindicado que se necesita una Europa «social» que tenga a los trabajadores «dentro» y no generar más desafección hacia la política, que es «caldo de cultivo de los populismos».
La líder de Sumar ha reconocido que no se puede aplicar una política basada en los «errores del pasado», es decir, en los «recortes» y ha cargado contra la política del Banco Central Europeo por una subida de tipos de interés «sin control», que genera «enorme empobrecimiento y malestar» en las clases sociales.
Díaz ha trasladado un mensaje de «esperanza» a las fuerzas progresistas dado que la primera ministra Giorgia Meloni, las derechas y la extrema derecha «no son imbatibles» y se les puede vencer. Así, ha relatado que un ejemplo es la campaña electoral de las generales, que era muy difícil con sus bases «derrotadas emocionalmente» tras los comicios del 28M, pero al final dieron una «lección democrática» y salieron a «ganar», dejando una mayoría progresista y plurinacional tras el 23J. En su opinión, la «batalla central» en el continente es combatir la desigualdad y para ello es esencial mejorar el salario mínimo. «Más que nunca necesitamos que la gente mejore sus salarios porque el impacto de la inflación nos empobrece a todos», ha remachado.
También ha llamado a poner el foco en los «indecentes» que tiene mucha gente en consejos de administración de las grandes empresas en Europa, con retribuciones que pueden alcanzar los 42.000 euros al día en algún caso, y es «a esa gente a la que defiende Georgia Meloni».
«Por eso es la estratégica la batalla en Italia de la representación de los sindicatos de clase (…) No se puede gobernar un país sin los agentes sociales», ha desgranado.