«Rustem Umerov no necesita de más presentaciones en la Rada (Parlamento ucraniano)». Con estas palabras el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, se refería a quien es su elegido para suceder a Oleksi Reznikov a cargo del Ministerio de Defensa. De origen tártaro, Rustem Umerov, que cumplió 41 años en abril, ha destacado como un buen gestor y un hábil negociador.
En marzo de 2022 Umerov, musulmán, participó en las primeras negociaciones con la delegación rusa que tuvieron lugar en Turquía. Sufrió picores y dolor en los ojos, como otros implicados como el millonario ruso Roman Abramovich. Umerov quitó importancia al suceso y no se unió a quienes decían que aquello había sido un intento de envenenamiento.
Aunque pertenece a un partido político opositor llamado Holos, el presidente Zelenski le ha encomendado misiones relevantes como la liberación de los soldados presos por su defensa de Azovstal en Mariúpol.
Estuvo también a cargo de la negociación sobre el acuerdo del grano, con la mediación turca y de la ONU. En principio salió adelante pero Rusia se ha descolgado desde el verano pasado, lo que causa grandes perjuicios no solo a Ucrania sino a los países dependientes de sus cereales. Precisamente este lunes el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se reúne con el líder ruso, Vladimir Putin, para tratar de retomar este acuerdo clave para el comercio global de alimentos.
Éxito como gestor de privatizaciones
Con experiencia como banquero de inversiones, ligado al sector tecnológico, su último cargo como responsable del Fondo de Propiedades Estatales, el organismo que supervisa la privatización de compañías públicas. En el primer semestre de 2023, el fondo registra sus mayores ingresos en 10 años, con 49 millones de dólares por la subasta de propiedades estatales, incluido el puerto marítimo de Ust-Duaisk, en la región de Odesa. En declaraciones a Reuters, dijo que «la pritavización es el último clavo en el ataúd del comunismo».
Oleksi Reznikov se ha visto forzado a dejar el cargo tras los continuos casos de corrupción en el Ministerio. Aunque no se ha demostrado que él se beneficiara o estuviera al tanto, era cuestión de tiempo que tuviera que salir. Su gestión ha sido buena, ya que ha ayudado a que Ucrania logre un gran apoyo de los países occidentales, pero 18 meses después de que Rusia invadiera Ucrania el presidente ha visto oportuno un cambio que mejore la imagen del Ministerio en la sociedad.
Umerov ha demostrado una gran maestría en una de las instituciones más complejas»
viktor tregunov, politólogo
«Desde el punto de vista estratégico no creo que haya cambios. Reznikov era bueno pero las acusaciones de corrupción han intoxicado el ambiente a su alrededor. Umerov ha demostrado gran maestría en el manejo del Comité Antimonopolio, una de las instituciones más complejas de la administración ucraniana. No cabe duda de que es una persona competente», afirma Viktor Tregubov, politólogo experto en cuestiones militares.
Rustem Umerov procede de una familia de la minoría tártara que fue deportada en 1944 por Stalin desde la península de Crimea a Uzbekistán. En 2015 el Parlamento ucraniano calificó esta deportación de unos 200.000 tártaros como genocidio.
«La deportación de tártaros de Crimea es uno de los grandes crímenes del régimen soviético. La realizaron los tiranos en el poder con el fin de exterminar a toda una nación», escribió en un artículo en Liga.net en 2021. Su compromiso con el pueblo tártaro es firme: fue asesor del líder histórico Mustafa Dzhemilev, quien fuera primer líder del Congreso tártaro de Crimea.
«Con un tártaro al frente de Defensa y un judío como presidente la narrativa del Kremlin sobre la Ucrania nazi queda aún más cuestionada», señala Nicolás de Pedro, investigador en The Institute for Statecraft de Londres. Para el politólogo Viktor Tregunov, «es un bono a su favor si bien no habrá sido un factor decisivo para ser elegido».
Umerov criticó desde un principio la invasión rusa de Crimea, península que quiere que Ucrania recupere en esta guerra. Fue cofundador de la Plataforma de Crimea, una iniciativa internacional cuyo fin es negociar con Rusia el fin de la ocupación de la península del Mar Negro.
La deportación de tártaros de Crimea es uno de las grandes crímenes del régimen soviético»
rustem umerov, ministro ucraniano de defensa designado
Umerov nació en Samarkanda. Los Umerov volvieron a finales de los 80 a su Crimea natal. En su época de estudiante vivió un año académico en Estados Unidos gracias al programa Future Leaders Exchange, del Departamento de Estado. Su inglés es fluido y por esa beca desde Rusia le llegaron a acusar de ser un espía al servicio de Washington. Se licenció en Económicas en Kiev y amplió sus estudios con un master en finanzas. También habla turco, ruso, ucraniano y tártaro.
En 2013 fundó la agencia de inversiones ASTEM y un programa social que vinculaba a políticos ucranianos, con abogados y líderes de la comunidad, en la Universidad de Stanford.
En 2019 fue elegido como diputado del partido Holos, de la oposición al Servidor del Pueblo de Zelenski. De todas formas, el presidente le encomendó en septiembre de 2022 la dirección de la agencia gubernamental más compleja y le invitó a participar en diversas negociaciones clave para Ucrania. Ha sido clave en el acercamiento a Emiratos Árabes Unidos: acompañó a la primera dama en marzo en una visita, y estuvo con el presidente Zelenski en mayo en Arabia Saudí.
Como Zelenski, tiene claro a lo que no va a renunciar Ucrania en cualquier negociación. «El Donbás y Crimea son nuestras líneas rojas. No cederemos nuestra gente ni nuestra tierra», dijo el año pasado a la agencia Anadolu. Los avances sobre el terreno de estas semanas antes del parón del invierno son cruciales: en el sur las tropas ucranianas están avanzando sobre la primera línea de defensa y aspiran a saltar los dientes de dragón y las minas.
En la Asamblea General de Naciones Unidas, que se celebra la tercera semana de septiembre y a la que asistirá el presidente ucraniano, habrá ocasión de tomar el pulso al apoyo al plan de paz de diez puntos de Zelenski entre la comunidad internacional.