El mandatario de Corea del Norte, Kim Jong Un, planea viajar a Rusia este mes para reunirse con el presidente ruso, Vladimir Putin, con el objetivo de incrementar la cooperación militar bilateral y discutir un posible acuerdo de suministro de armamento.
La portavoz del Consejo de Seguridad de la Casa Blanca, Adrienne Watson, ha alertado este lunes de que «las negociaciones sobre armas entre Rusia y la RDPC (República Democrática Popular de Corea, nombre oficial de Corea del Norte) están avanzando activamente«.
«Tenemos información de que Kim Jong Un espera que estos contactos continúen y que incluyan una reunión diplomática a nivel de líderes en Rusia. Instamos a la RDPC a cesar sus negociaciones de armamento con Rusia y cumplir los compromisos públicos planteados por Pyongyang de no proporcionar ni vender armas a Rusia», ha añadido Watson en declaraciones recogidas por la agencia de noticias Bloomberg.
Según han trasladado fuentes estadounidenses y aliadas al diario ‘The New York Times’, Kim viajará desde la capital de Corea del Norte, Pyongyang, hasta la ciudad portuaria rusa de Vladivostok en un tren blindado, una visita que también podría incluir una parada en Moscú.
Se espera que ambos acudan a un foro económico que se celebra en la Universidad Federal del Lejano Oriente de Vladivostok del 10 al 13 de septiembre, un encuentro que el norcoreano ya presenció en abril de 2019 durante su último viaje al país. En su agenda, Kim también tiene previsto visitar el muelle en el que se encuentra la flota rusa del Pacífico, según el ‘NYT’.
Esto se produce después de que la pasada semana la Inteligencia estadounidense confirmara que Moscú y Pyongyang avanzan «activamente» en sus negociaciones para un posible acuerdo de armamento, según recogió la cadena CNN.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, ha informado de que Putin y Kim han intercambiado cartas prometiendo en ellas «aumentar su cooperación bilateral». «Una discusión de alto nivel puede suceder en los próximos meses», alertó.
El ministro de Defensa de Rusia, Sergei Shoigu, se reunió con Kim el pasado mes de julio en pleno aumento de la tensión en la región y con Rusia inmersa en la invasión de Ucrania. En su visita, Shoigu le trasladó a Kim una propuesta para realizar una serie de ejercicios militares conjuntos con China.