La OMS y EEUU informaron el 18 de agosto de que se ha detectado una nueva variante de la Covid-19, la BA.2.86, que incluye tantas mutaciones que se ha clasificado en la categoría de linajes del coronavirus bajo vigilancia. Desde entonces se han localizado, al menos, seis casos en cuatro países, entre ellos Estados Unidos y China. En España, la Conselleria de Salut ha detectado la variante, que ha sido denominada Pirola, en las aguas residuales de Catalunya pero por el momento no hay constancia de su presencia en las muestras clínicas de pacientes.
Según explican fuentes del Ministerio de Sanidad, será el sistema de vigilancia centinela de la Covid-19, la gripe y otras infecciones respiratorias, que se puso en marcha en 2021 para tener información de cómo evolucionan estas enfermedades de forma conjunta, tanto en el ámbito de la atención primaria como en los hospitales, a través de la secuenciación de algunas muestras representativas, el que detectará si Pirola -u otras variantes- han llegado efectivamente a nuestro país, como parece indicar su detección en las aguas residuales.
El último informe publicado, correspondiente a la semana del 14 al 20 de agosto, indica que la incidencia de Covid va al alza desde finales de junio, pero aún se sitúa en 76 casos por 100.000 habitantes, muy lejos de los picos alcanzados en las primeras olas. Y no menciona la detección de la variante Pirola en España, por lo que el incremento no puede achacarse a este sublinaje.
Las mutaciones
No obstante, a los científicos les preocupa la nueva subvariante porque incluye muchas más mutaciones que sus predecesoras, por lo que les recuerda al «salto» que se produjo a finales de 2021, cuando la variante ómicron desplazó a la delta. De hecho, la OMS ha avisado de que se está vigilando de cerca la BA.2.86 porque «se desconoce el impacto potencial» que podría tener sus «numerosas mutuaciones».
El jefe del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Germans Trias i Pujol e investigador del Institut de Recerca de la Sida (IrsiCaixa), Roger Paredes, explicó recientemente en El Periódico de Catalunya, del grupo Prensa Ibérica, que, aunque por el momento se desconoce si la nueva variante tendrá más escape inmunológico o será más transmisible, el «aumento de mutaciones es un cambio significativo, similar al salto que se produjo entre las variantes delta y ómicron».
Cabe recordar que la llegada de la ómicron desplazó a la delta y provocó la sexta ola de Covid, en las navidades de 2021. Si bien, este linaje aún presente era menos grave que su predecesor.
