La propuesta de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) de eliminar la jornada intensiva en los centros educativos y distribuir las horas lectivas a lo largo de la mañana y de la tarde para reducir el absentismo escolar temprano en España y contribuir a una educación más inclusiva, ha suscitado un debate social en torno a los horarios en los centros educativos, del que Canarias no está exento. Mientras los sindicatos descartan la jornada partida y consideran el horario intensivo un logro histórico del que Canarias es pionera, las ampas solicitan que se lleve a cabo un análisis exhaustivo sobre la idoneidad de la jornada continua, implantada desde hace tres décadas en las Islas, al tiempo que instan a la Administración a poner los medios necesarios para facilitar la conciliación laboral y familiar.
«Hace falta un análisis y un debate serio sobre si ha sido positiva la implantación de la jornada continua, y si lo seguirá siendo para el alumnado en la época actual en la que vivimos. Como Federación de Ampas integrada dentro de la Confederación regional Confapa Canarias, entendemos que todo el sistema educativo está en permanente debate, porque la sociedad cambia, lo que no cambia es quizás los métodos educativos y la manera de llevarlos administrativamente dentro de las infraestructuras educativas», indicó Sergio de la Fe, vicepresidente de Confapa Canarias, la Confederación de Ampas de las Islas, y presidente de la Federación de Ampas Galdós de Gran Canaria.
Las ampas de Canarias piden que el debate se centre en garantizar la mejor educación para el alumnado
De la Fé lamenta que el debate se centre en la jornada lectiva, la jornada laboral docente y el horario de los centros. «Es algo que se suele mezclar e incluso en muchos casos hasta tergiversar para simplificar el debate al respecto de que es lo mejor para la comunidad educativa, olvidando que al final lo que importa es el alumnado, su rendimiento y la capacidad que pueda darle el sistema educativo, de forma que la jornada lectiva, partida o continua, sea la más amable posible para que su rendimiento escolar sea el más óptimo».
En conclusión, el representante de los padres y madres de los estudiantes canarios insistió en la necesidad de hacer «un análisis serio» sobre la jornada continua en el ámbito escolar y, al mismo tiempo, que la administración educativa se comprometa a dotar de medios para facilitar la conciliación laboral y familiar, en tanto que la jornada continua se siga entendiendo como la mejor fórmula para garantizar la calidad educativa.
Pseudo-empresas de servicios
«Las ampas nos hemos convertido en pseudo-empresas de servicios para poder garantizar el acceso de nuestros hijos e hijas al sistema educativo. La Administración tiene que tomar cartas en el asunto para garantizar una escuela inclusiva e igualitaria, para todas las familias que tienen unas obligaciones laborales en horarios que no tienen nada que ver con la jornada lectiva del alumnado, o tienen otras obligaciones sociales como mayores a su cargo u otros escolares con necesidades educativas especiales».
Dicho esto, Sergio de la Fe hizo hincapié en que el deseo de las familias no es mantener una guerra contra el profesorado. «Hay sindicatos que tratan de simplificar nuestra demanda como un intento de confrontación, pero nada más lejos de la realidad. Lo mejor para el docente será siempre lo mejor para el alumnado, pero sin perder de vista, obviamente, que al final son los intereses del alumnado y su educación los que deben prevalecer», concluyó.
Por su parte, los sindicatos del profesorado de la enseñanza pública del Archipiélago, ANPE Canarias y STEC-IC, no comparten la propuesta de la OCDE de eliminar la jornada continua en los centros educativos.
ANPE y STEC-IC insisten en que la calidad de la enseñanza pasa por rebajar las ratios en las aulas
Pedro Crespo, presidente de ANPE Canarias recordó que la jornada continua viene acompañada por un horario de comedor en los centros escolares, y por actividades extraescolares durante las primeras horas de la tarde. «No encontramos que tenga sentido que esté el alumnado en horario lectivo de mañana y de tarde, de hecho hay que posibilitar también el que la familia pueda recoger a sus hijos a última hora de la mañana y almorzar con ellos, si su horario se lo se lo permite, y dedicar el horario de tarde a otras actividades».
Crespo apuntó que el paso que se dio para cambiar la jornada partida en Canarias hace más de 30 años a la jornada continua, se llevó a cabo dentro de un proceso de elección de los propios consejos escolares de cada centro y se optó por el horario continuo. «No tiene sentido esa vuelta atrás ahora, ni la obligatoriedad a ese planteamiento de jornada partida» y recordó que la mejora de la mejora de la calidad pasa por reducir las ratios en las aulas.
Gerardo Rodríguez, portavoz del STEC-IC señaló que el horario intensivo es un logro adaptado prácticamente en toda la población de Canarias, que permite compatibilizar la vida personal y la vida laboral, para las familias y para los docentes. Asimismo recordó que Canarias tiene la particularidad de que es un territorio fragmentado y hay «un problema grave» en algunas islas de fluidez en el transporte. «Desde nuestro punto de vista, no convendría que hubiera una jornada partida porque, entre otras cosas, para trasladarse es muy complicado, hay gente que vive a más de 100 kilómetros de su centro de trabajo».
STEC-IU tampoco comparte que la jornada partida mejore el abandono escolar o sea una ventaja para familias más desfavorecidas. «Hay informes que opinan todo lo contrario, el abandono escolar ha bajado considerablemente por la jornada continua, y su mejora está más relacionada con bajar las ratios para elevar la calidad de la enseñanza. Lo que nosotros proponemos es que los ayuntamientos se impliquen en las actividades extraescolares; y que se establezca, de una vez por todas y con carácter definitivo, la acogida temprana.
El viceconsejero de Educación del Gobierno de Canarias, José Manuel Cabrera, tampoco comparte la idea de volver a la jornada partida y considera que tanto en Canarias como a nivel nacional, las horas de formación son incluso superiores a las de otros países, por lo que no considera que una ampliación del horario entre mañana y tarde vaya a producir una mejora en la calidad educativa. «Entendemos que donde hay que mejorar es en la calidad de ese horario y en la calidad de la formación, independientemente de que luego se pueda complementar con clases de refuerzo o de apoyo en horario de tarde en las actividades complementarias o extraescolares. Más que plantearnos el quitar la jornada continua, lo que nos planteamos es mejorar la formación porque entendemos que las horas que pasan los chicos en los centros educativos en Canarias y a nivel nacional es suficiente, incluso superior a otros países», apuntó el viceconsejero sobre la jornada continua, que actualmente está extendida en todos los centros educativos públicos del Archipiélago. | M. J. H.