La inflación de Alemania se reduce mínimamente y menos de lo esperado en agosto, hasta el 6,1%, frente al 6,2% de julio, según el dato preliminar publicado por Destatis, la oficina de estadística federal. Mientras, la tasa subyacente se mantuvo sin cambios, en el 5,5%.

En detalle, los precios de los alimentos siguieron aumentando a un ritmo superior a la media. En el octavo mes del año se encarecieron un 9% en comparación con agosto del año pasado, tras la subida del 11% registrada en julio. Los servicios aumentaron sus costes un 5,1%.

Por su parte, el aumento de los precios de la energía fue del 8,3%, frente a la subida del 5,7% del mes anterior. Como explican desde Destatis, se debe, entre otras cosas, al efecto de base debido al bajo nivel del índice en agosto de 2022, que estuvo influenciado por las medidas del tercer paquete de ayuda del gobierno.