El FC Barcelona ha presentado este mes de agosto la documentación necesaria ante la Comisión de Valores y Bolsa de Estados Unidos (SEC) para establecer la sede de Barça Media, su filial de contenidos, en Países Bajos. Al estilo de Ferrovial, que trasladó su sede allí, tomando una decisión que levantó revuelo. Según ha avanzado El País, el club contará igualmente con una sucursal en Barcelona, desde la que gestionará todo el negocio de la filial.
El club deportivo se muda con la intención de acelerar su entrada a cotización en el Nasdaq. Si todo continúa según lo previsto, el Barça debutaría en Wall Street a través de una SPAC y del acuerdo con Mountain & Co. I Acquisition Corp, firma que ya cotiza en el parqué estadounidense. Esta operación no implica el traslado de su sede operativa ni de los negocios. Pero Barça Media pasaría a ser una sociedad holandesa.
La decisión se produce después de que el pasado 11 de agosto el club de fútbol catalán anunciara un acuerdo con Mountain Partners, firma especialista en inversiones en compañías tecnológicas y sectores emergentes, para crear una spac o sociedad de inversión para sacar una parte de la sociedad a cotizar en el mercado de valores estadounidense, según ha confirmado la agencia de noticias EFE.
La SPAC tiene hasta el 23 de noviembre para cerrar la operación, pero estaría buscando ya ampliar el plazo, según afirman fuentes conocedoras. El contrato entre el Barça y Mountain & Co tendrá validez hasta el 11 de agosto de 2024, aunque el objetivo es cerrar la operación antes de finales de año.
El acuerdo firmado por el Barça y la Spac recoge que el negocio de contenidos de Barça Media está valorado en unos 910 millones de euros y que englobará Barça Vision, Barça Studios y Barça eSports, con dirección de Toni Cruz. El objetivo es acelerar las iniciativas del club en el sector digital y poder difundir los contenidos de Barça Media a nuevas audiencias por todo el mundo.
Según afirma El País, además, el Barça tendrá que pagar a su filial por los contenidos que produzca para el club. La duración inicial del contrato será de 20 años, prorrogables automáticamente por otros 20, a no ser que haya una ruptura por incumplimiento contractual. La operación está pendiente de la aprobación de la Asamblea General de Socios del FC Barcelona, prevista para el próximo mes de octubre.