Las expectativas de inflación de los consumidores para los próximos 12 meses, que recoge la Universidad de Michigan en su sondeo sobre la confianza del consumidor, han vuelto a subir ligeramente en agosto, hasta alcanzar el 3,5%, desde el 3,4% registrado en julio.
«La lectura actual se mantiene por encima del rango del 2,3% -3,0% visto en los dos años anteriores a la pandemia», ha señalado Joanne Hsu, directora de la encuesta.
«Las expectativas de inflación a corto plazo aumentaron ligeramente, ya que son particularmente sensibles a las fluctuaciones de los precios de los alimentos y la energía. En base a nuestras estimaciones de que los precios de la gasolina tendrán una tendencia al alza durante el resto del año, no sería sorprendente ver aumentos en las expectativas durante los próximos meses», han valorado los expertos de Oxford Economics.
Por su parte, las expectativas de inflación a largo plazo se han situado en el 3,0% por tercer mes consecutivo, manteniéndose dentro del estrecho rango de 2,9%-3,1% durante 24 de los últimos 25 meses.
No obstante, «estas expectativas son elevadas en relación con el rango de 2,2%-2,6% visto en los dos años anteriores a la pandemia», ha reiterado Hsu.
En cuanto al índice del sentimiento del consumidor, en agosto ha caído hasta los 69,5 puntos desde los 71,6 puntos de julio.
«Después de aumentar bruscamente durante los últimos meses, la confianza del consumidor se movió lateralmente en agosto con una pequeña disminución que no es estadísticamente diferente de julio», ha explicado la directora de la encuesta.
Para los estrategas de la firma británica, «es probable que la confianza caiga aún más en los próximos meses, a medida que el mercado laboral se debilite, los consumidores recurran aún más al exceso de ahorro y la economía entre en un período de crecimiento más lento».
Además, el índice de las condiciones económicas actuales también ha experimentado un retroceso hasta los 75,7 puntos, frente a los 76,6 previos, mientras que el componente de expectativas ha bajado hasta los 65,5 puntos en agosto desde los 68,3 del mes anterior.
«Si bien las condiciones de compra de bienes duraderos y las expectativas sobre las condiciones de vida mejoraron, las perspectivas económicas a largo plazo retrocedieron alrededor del 12% este mes, pero siguen siendo más altas que hace solo dos meses», ha agregado Hsu.
Asimismo, ha indicado que «los consumidores sopesaron una combinación de factores positivos y negativos en la economía, lo que llevó a diferentes tendencias compensatorias entre los grupos demográficos y perciben que las rápidas mejoras en la economía de los últimos tres meses se han moderado, particularmente con la inflación. Están tentativos sobre las perspectivas futuras».
Con todo, «los niveles actuales no afectarán nuestro pronóstico de que la Reserva Federal mantendrá los tipos de interés sin cambios hasta fin de año, pero nuevos movimientos al alza aumentarían el riesgo de aumentos adicionales de las tasas», han concluido desde Oxford Economics.
