Los socorristas de la playa de Las Canteras, pertenecientes a la Cruz Roja , experimentaron una impactante sorpresa este viernes. Cuando se acercaron para inspeccionar un fragmento de red de pesca conocido como «trasmallo» que flotaba desamparado detrás de La Barra, en las cercanías de la playa de la Cícer, se encontraron con una situación desoladora.
Mientras se disponían a recoger la red, descubrieron que cinco jóvenes tiburones martillo se encontraban atrapados en esta trampa mortífera. La situación era angustiosa, ya que estas criaturas marinas se habían enredado en el dispositivo.
Pascual Calaguig, un veterinario afiliado al Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de Tafira (organismo dependiente del Cabildo Insular de Gran Canaria), estimó que llevaban alrededor de 2 o 3 semanas muertos en el agua.
Las redes de pesca abandonadas constituyen una amenaza grave para la vida marina, particularmente para especies que nadan en aguas poco profundas, como es el caso de estos tiburones. La situación es especialmente perjudicial debido a que estos animales quedaron atrapados en una trampa letal.
Cabe resaltar que la captura de tiburones martillo está completamente prohibida, principalmente debido a la amenaza que enfrentan por la sobrepesca. Esta situación contribuye a la disminución de sus poblaciones y a la fragilidad de su existencia en los ecosistemas marinos.