Al menos 16 personas han sido detenidas este jueves por intentar irrumpir en la Embajada nipona en Seúl para mostrar su oposición al vertido de aguas tratadas de la central nuclear de Fukushima al océano, cuya descarga ha comenzado este jueves, en la línea con el plan del Gobierno japonés.

La Policía surcoreana ha indicado que los arrestados son estudiantes universitarios, que se habían reunido en el edificio que alberga la sede diplomática e intentaron entrar alrededor de las 13.00 horas (hora local), cuando se inició el vertido, mientras gritaban consignas condenando el vertido de agua.

Los agentes les han arrestado acusados de allanamiento de morada y violación de la Ley de Asambleas y Manifestaciones, según ha informado la agencia de noticias surcoreana Yonhap.

La compañía Tokyo Electric Power Company (TEPCO) inició este jueves la liberación al océano del agua tratada de la central nuclear, semanas después de que la autoridad nuclear japonesa aprobara de forma definitiva el plan del Gobierno tras el visto bueno del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) para el cumplimiento con los estándares internacionales.

Después de que las condiciones climáticas y marítimas hayan sido favorables, la compañía ha encendido las bombas de transferencia de agua sin que se hayan reportado anomalías en las operaciones iniciales.

El agua se ha mantenido en tanques después de pasar por un sistema avanzado de procesamiento de líquidos que elimina la mayoría de los radionúclidos excepto el tritio, pero los recipientes de almacenamiento están llegando a su capacidad máxima. Se sabe que el tritio es menos dañino que otros materiales radiactivos, como el cesio o el estroncio.