Un desenlace cruel. Quique Llopis ha subido otro peldaño. El atleta del Playas de Castellón tuteó a los mejores vallistas del planeta y terminó noveno en su segundo Mundial -el año pasado fue décimo sexto en Oregon-, una posición que tiene un ligero sabor amargo porque se quedó a un puesto de la final, pero es un resultado excelente para un atleta de 22 años que este año ha dado otro paso al frente, igualando su marca personal (13.30).
El atleta de Bellreguard corrió la segunda de las tres semifinales. Pasaban los dos mejores de cada eliminatoria y los dos mejores tiempos, y como Llopis entró tercero con el mejor tiempo hasta ese momento tuvo que esperarse en la ‘silla caliente’, pero tanto el tercero, el francés Belocian (13.23), como el cuarto, el suizo Joseph (13.25), mejoraron su registro por solo cinco centésimas.
Llopis, orgulloso
«Estoy muy contento porque no estaba ni entre los veinte mejores con marcas antes del Mundial y ahora soy noveno del mundo. Es una alegría y algo que hace dos meses era inimaginable. Da rabia quedarte tan cerca pero hay ocho que han corrido más que yo y no hay otra. Ahora quiero pensar que el año que viene será muy importante», analizó dolido pero orgulloso de poder codearse junto a la élite mundial. Ahora, y tras este gran paso en su carrera, Llopis quiere seguir con su excelente progresión.