¿Tiene en casa una toalla vieja (o más de una) que necesita cambiar? No lo tires, te explicamos algunos trucos de limpieza, una valiosa ayuda a la que no renunciarás.
Todos tenemos en casa toallas viejas o afieltradas, manchadas o, en definitiva, muy gastadas, que ya no utilizamos para secarnos después de ducharnos o limpiarnos la cara. ¿Ese cubo de «trapos viejos» puesto en la lavandería para segundos usos que nunca llegan se está convirtiendo en una pila descontrolada? A continuación, te desvelamos cómo puedes dar una segunda y última vida a la toalla desechada que aún puede utilizarse en las tareas domésticas.
Pues bien, esta toalla vieja y desechada se puede utilizar en tareas domésticas que habitualmente nos cuesta hacer o simplemente nunca encontramos la mejor solución para resolver. Estos trucos de la abuela, en cambio, son fáciles, intuitivos y aptos incluso para quienes tienen dificultades para moverse entre la limpieza, los cubiertos oxidados, la ropa por lavar y las lavadoras sucias. Veámoslos ahora, estamos seguros de que les sorprenderán.
Una cama para mascotas
Si unes dos toallas viejas del mismo tamaño, rellenas su interior y coses su contorno, podrás conseguir una cama para tu perro o gato. El relleno puede ser cualquier otro material u otra toalla vieja que cortes en pequeñas tiras.
Alfombras o relleno de cojines
¿Están demasiado estropeadas? Prueba a cortar tus toallas en pequeños trozos y utilizarlas como relleno para cojines, almohadas, pufs, camas para mascotas o cualquier cosa que necesites.Una original alfombra
Con toallas viejas puedes conseguir alfombras de lo más originales y divertidas para el baño o cualquier otro rincón de la casa. Puedes probar a recortar tiras de varias toallas distintas y trenzarlas como si fuera cabello. Después, enrolla esas trenzas formando círculos cada vez más pequeños y cóselas entre ellas.
Otro tipo distinto de alfombra que puedes conseguir con toallas viejas es una de «pelo». Hazte con una rejilla de goma, de esas que se colocan debajo de las alfombras para que no se muevan, corta las toallas en pequeñas tiras y ata con un nudo cada una de esas finas tiras a la rejilla. El resultado es de lo más sorprendente.
Coser zapatillas para el baño
Después de ducharse, no hay nada mejor que salir de la ducha con un par de zapatillas de rizo antes de secarse los pies. De este modo, evitarás manchar el suelo o mojar los calcetines y los zapatos de la casa.
Con una toalla vieja que sea lo suficientemente grande, puedes hacer tu propio par de estas comodísimas zapatillas. También necesitarás las suelas de las zapatillas que ya no uses. Servirán de plantilla para recortar porciones de toallas de la misma forma. A continuación, fíjalos a la goma con un pegamento adecuado y deja que se sequen.
Con el resto de la toalla, puedes hacer biseles para poner los pies. Por último, sólo queda ensamblarlas con aguja e hilo. Y ahora tienes nuevas zapatillas de rizo para el baño.
Toallitas para limpieza
El truco más sencillo para dar una nueva vida a tus viejas toallas es recortarlas en pequeños cuadrados para convertirlas en trapos para limpiar la casa. También puedes guardarlas y utilizarlas para limpiarte la cara, pero siempre presionando suavemente y con movimientos circulares para no dañar la piel.
Un bolso para la playa
Al ser absorbentes, las toallas son perfectas para llevar a la playa o a la piscina y guardar en ellas los bañadores mojados. Para reciclarlas y conseguir una sencilla bolsa de playa sólo necesitarás una toalla vieja, unas asas de tela, tijeras, hilo y una máquina de coser.Úsalas como relleno.
Un neceser de viaje
Aprovecha tus vacaciones este verano para darle una nueva vida a tus viejas toallas y convertirlas en un práctico neceser de viaje. Sólo tendrás que coser pequeños bolsillos a una toalla de pequeño tamaño y añadirle una tira de tela o cuerda para cerrar tu neceser.
Baberos para los más pequeños
Si tienes hijos ya te habrás dado cuenta de que mantenerles limpios a la hora de comer es una misión imposible. Pues bien, ahora podrás olvidarte de tener que gastarte un dinero en baberos que limpiarás una y otra vez. En la red podrás encontrar un sinfín de patrones que te ayudarán a recortar tus toallas viejas y absorbentes hasta darles forma de babero.
Recambios para la mopa
El tejido de la toalla las hace perfectas para atrapar la suciedad y la humedad. Por esa razón ahora puedes darles una nueva vida y limpiar con ellas el suelo usándolas como recambios para la mopa. Corta la toalla en franjas del tamaño necesario y prueba a coserla o a colocarle botones para que se sujete a la mopa. Cuando esté sucia puedes meterla en la lavadora y volver a utilizarla.
Manteles individuales
Esta opción es perfecta para los más pequeños de la casa. Elige el tamaño al que quieres cortar la tu mantén y busca una tela estampada que te guste. Ahora recorta la toalla y la tela a ese tamaño y cóselas. Para usarlo sólo tendrás que colocarlo sobre la mesa con la parte absorbente hacia abajo.
Limpieza de cubiertos
¿Cuántos de ustedes tienen cubiertos guardados en el cajón que no se utilizan con frecuencia, sino sólo en vacaciones u ocasiones importantes? Quizás muchos. El problema de esta cubertería es que se oxida muy rápidamente, creando antiestéticas vetas oscuras en la superficie. Sin necesidad de comprar productos químicos en tiendas especializadas, puedes coger una toalla vieja grande, ponerla en remojo bajo el grifo y después fregar toda la superficie con jabón de Marsella.
Una vez hecho esto, vierte también unas cucharadas de bicarbonato sódico, distribuyéndolo bien, coloca los cubiertos sobre ella pero sólo sobre la mitad de la toalla y cierra la solapa restante sobre los cubiertos. Espere cuatro horas, luego pase los cubiertos por agua corriente tibia para eliminar el exceso de producto, séquelos con un paño seco y ¡listo! Verás qué brillantes y perfectamente limpios habrán quedado después de este ingenioso truco.
Fabricación de un guante para fregar
Cuando se exfolia la piel en la ducha, la ayuda de un guante puede ser muy útil. Bueno, puedes hacer un par con una toalla vieja. Sólo hay que cortar dos piezas para que tengan la forma de un guante y luego coserlas.
En lugar de deshacerse de las toallas viejas, aquí tienes 3 ideas creativas e ingeniosas para reciclarlas y darles una segunda vida, lo que evitará que se desperdicien.
Hacer guantes de cocina
Cuando se utiliza el horno, por ejemplo para cocinar un buen pastel, siempre es una buena idea tener un par de guantes de cocina para evitar quemarse.
Si tu toalla vieja es lo suficientemente gruesa, puedes usarla para hacer guantes de cocina. Para ello, tendrás que utilizar tus propios guantes como plantilla, dibujando su forma en un trozo de cartón. Recorte partes de la toalla en función de esto y deje unos milímetros para la costura. Por último, coser las dos partes.
Los que tienen poca destreza manual pueden utilizar simplemente toallas viejas como simples agarraderas cuadradas, lo que hace que el proceso creativo sea mucho más sencillo y rápido.
