Conflicto entre el Partido Popular y Vox en la localidad de Alba de Tormes, en la provincia de Salamanca. La alcaldesa del municipio, Concepción Miguélez, ha retirado la bandera gigante (treinta metros de largo por cuatro de alto) que iba a izarse en lo alto del castillo de los duques de Alba de esta localidad salmantina. De acuerdo con las fuentes locales, el levantamiento de esta bandera era una exigencia que puso Vox para votar a favor de la investidura de la alcaldesa ‘popular’, medida que, ya con el gobierno municipal conformado, ha caído en saco roto tras ser la propia alcaldesa quien la ha retirado. 

El teniente de alcalde de Alba de Tormes, Juan Antonio Pascual Pastor (Vox), anunció que se izaría la bandera de grandes dimensiones en la fortaleza del siglo XII, coincidiendo con el mercado medieval del municipio.

Pascual Pastor, teniente de alcalde y concejal de Turismo y de Desarrollo Local, había anunciado que este sábado se izaría una bandera «de 30 metros por 4» en esta fortaleza del siglo XII coincidiendo con la inauguración del mercado medieval. La gran bandera estaba lista para ser desplegada, pero en palabras del propio dirigente de Vox, «la alcaldesa fue después y se la llevó».

«Me dijo que Patrimonio no nos deja, que tampoco la Casa de Alba, así que se ha inaugurado el mercado sin bandera», ha argumentado. Preguntado por si esto supone una ruptura en su pacto de Gobierno, debido a que el levantamiento de la bandera fue una condición para su aprobación, Pascual Pastor ha asegurado que supone «una fisura«.

«Todos los matrimonios discuten»

 Sin embargo, el edil de Vox se ha mantenido en una línea tranquila, dejando una frase para el recuerdo: «El pacto sigue en marcha, todos los matrimonios discuten«. Por su parte, la alcaldesa ha argumentado que Pascual «la colocó sin consultar si podía hacerlo» y que no disponen de autorización para izar una bandera nacional en el castillo. Al calor de estas respuestas, la siguiente pregunta era evidente: ¿Por qué suscribieron, entonces, la petición de Vox? A ello, la alcaldesa sostuvo que «tenían el acuerdo de poner una bandera, pero no solicitaron la autorización a Patrimonio». «Colocarla en el castillo el viernes no se me consultó, me dijo que no la pondría y estaba puesta. La retiramos sobre las diez de la noche, y era de 30 metros por 4″, ha explicado la alcaldesa ‘popular’.

Este municipio salmantino estaba gobernado por el PP de la mano con Ciudadanos hasta el 28 de mayo, cuando las elecciones municipales dieron lugar al pacto con la extrema derecha, a pesar de que los ‘populares’ podrían haber gobernado en solitario, como les ofrecieron los socialistas, porque les daban los números para ello.

El Castillo de los Duques de Alba

El Castillo de los Duques de Alba, la fortaleza donde Vox pretendía izar la bandera de España, es una edificación histórica, cuyos orígenes se remontan al siglo XII. En una primera instancia, Fernando II de León ordenó la construcción de una atalaya, y un siglo después, Sancho IV de Castilla hizo que la torre pasase a ser un castillo completo. Actualmente solo se conserva la torre del homenaje, de las seis que llegó a tener en su momento de máximo esplendor. Cuenta con el estatus de Bien de Interés Cultural, motivo por el que es necesario el permiso de Patrimonio para realizar cualquier modificación, como sería la colocación de una bandera.

Sufrió grandes daños tras los conflictos de la época de Enrique IV de Castilla, y fue el I Duque de Alba de Tormes, García Álvarez de Toledo y Carrillo de Toledo, quien ordenó su reconstrucción y lo convirtió en su palacio privado. Actualmente, por este motivo, es propiedad de la Casa de Alba.

El interior del castillo alberga varias salas, entre ellas, una que acoge pinturas murales de la batalla de Mühlberg, y un mirador. En su exterior e inmediaciones se encuentran las ruinas de las excavaciones que pusieron la rúbrica de su pasada majestuosidad.