MADRID, 19 (CHANCE)

En un emocionante concierto, repleto de amor familiar y emociones profundas, Antonio Carmona deleitó al público en el escenario de Trocadero, en Sotogrande. Acompañado por sus talentosas hijas, Marina y Lucía Fernanda, la velada se convirtió en un tributo musical lleno de significado y alegría.

Lucía Fernanda, embarazada y radiante, orgullosamente presume de su incipiente barriguita premamá con un vestido midi con brillos en tono cobre mientras canta ‘Canastera’. Su próxima maternidad convertirá al aclamado artista en abuelo, un título que llevará con orgullo.

Antonio presentó a sus hijas lleno de orgullo ante el público: «Os tengo que pasar a la remolino de mi casa, la chica, peligrosa. Os dejo aquí a Lucía Fernanda». Por otro lado, el artista tampoco dudó en presumir de su otra hija: «Este pibón que tengo al lado se llama Marina Carmona, que es mi hija, no le hagan ojos eh».

La canción «Me encanta», escrita para honrar a su difunto padre, el legendario guitarrista flamenco Juan Habichuela, llenó el ambiente de emotividad. Antonio Carmona compartió con el público su amor y respeto por su padre, cuyo cumpleaños coincidió con esa misma noche: «Hoy cumpliría años mi padre, era un tipito así de chiquitito y tocaba la guitarra que no se puede aguantar si hay alguien aquí que conozca el flamenco tiene que conocer a mi padre ,estos años que llevo sin él, cada día me parece una cuesta alucinante, pero lo llevo dentro de mi corazón y mi alma y lo voy a llevar toda la vida».

Acompañado por Juan Carmona Jr, esposo de Sara Verdasco y cuñado del tenista Fernando Verdasco, el escenario se llenó de energía musical. Las hijas de Carmona, Marina y Lucía Fernanda, ofrecieron sus voces para los coros, contribuyendo a la emotiva velada.

Antonio Carmona también aprovechó el concierto para dar visibilidad a algunos otros temas, y no dudó en hacer referencia a los migrantes y a la importancia de ofrecer segundas oportunidades, conectando la música con la conciencia social: «Hay cosas que el corazón no puede negar y hay muchas personas que llegan buscando una nueva oportunidad con sus hijos».

El escenario fue testigo de momentos de profunda conexión familiar y musical, consolidando aún más el amor que une a Antonio Carmona con sus hijas.